Hay veces que te reencuentras con alguien, hay días en los que al doblar una esquina, te chocas de frente con quien llevabas tiempo esperando ver. A veces pasa de noche, le devuelves el saludo, hola, hola; tal vez diez minutos de conversación, puede ser que quince; y ves que no... ya nada es como antes, nada es lo mismo. El hueco de tú estómago, sin darte cuenta, se ha llenado. Las mariposas han muerto.
Las cosas cambian... a veces, las cosas cambian.
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1 comentario:
Si es verdad. El tiempo cura casi todo. Lo que no lo cura por lo menos lo esconde debajo de la cama o debajo de la alfombra.
Saludos.
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